En un esfuerzo por promover el bienestar y la calidad de vida de las y los usuarios, el Hospital del Salvador (HDS), ha anunciado la implementación de un innovador proyecto de fomento lector en las Salas de Atención Cerrada durante el mes de noviembre.

Esta iniciativa, desarrollada entre la Oficina de Informaciones Reclamos y Sugerencias (OIRS), más el departamento de Comunicaciones y Vinculación con el Medio, ambos del HDS, y el Servicio Nacional del Patrimonio Cultural, busca enriquecer la experiencia de hospitalización a través de la literatura.

La Jefa de la OIRS, Gricel González, destacó la importancia de este proyecto al afirmar que «no se trata solo de tener libros en las salas, sino de brindar una experiencia completa de lectura, queremos empoderar a los usuarios, permitiéndoles explorar nuevas perspectivas a través de la lectura. La inclusión de actividades culturales y de fomento lector en el plan de tratamiento enfatiza la importancia de abordar la salud mental desde una perspectiva completa”.

El proyecto piloto de fomento lector, es un ejemplo que traduce el espíritu del Hospital Del Salvador, en buscar la recuperación integral de la salud mental de la comunidad usuaria y la humanización de la atención de todos y todas.

¿Cómo se llevará a Cabo?

María Eugenia Báez, reconocida bibliotecóloga con 35 años de experiencia en el Servicio Nacional del Patrimonio Cultural,  especializada en promoción del libro y la lectura, será la facilitadora de las intervenciones. Báez ha trabajado previamente en programas de biblioterapia con adolescentes y ahora trae su experiencia al ámbito hospitalario y la salud mental.

La iniciativa contempla la presencia de libros en las salas de hospitalización, distribuidos en cajones o canastas para facilitar el acceso. Además, se llevarán a cabo talleres de fomento lector especializados. Estos talleres abordarán temáticas relevantes como el feminismo, participación social, salud mental, la niñez y diversidades, entre otras.

Báez explicó que, “el patrimonio bibliográfico, entendido como libros, cómic, revista o el material que se vaya a utilizar en diferentes formatos, va a ser aportado por el Servicio Nacional del Patrimonio Cultural a través de la Coordinación Regional de Bibliotecas Públicas. Dependiendo de la modalidad que trabajemos en cada sala, por ejemplo, podemos implementar cajas viajeras, que son pequeños contenedores que traen una cantidad de libros que se pueden dejar en las salas, para que los pacientes puedan leer a gusto aquel material que les sea significativo o que les llame la atención, ya sea de lectura por placer, o por alguna lectura que en realidad les emita algún significado dentro de sus propias patologías”.

Se espera que el plan inicie en la quincena del mes de noviembre en salas de hospitalización y dependiendo de los resultados, extender su duración y áreas de acción.